Ciudad Juarez, Chihuahua, México.- (SECOSICE) Los Templos Evangélicos de Ciudad Juárez, México, en la frontera con Estados Unidos, están convertidas en trincheras y refugio de miles de miembros que desean la paz en esta ciudad, azotada por el crimen desde hace dos años.
Las predicaciones han cambiado y desde el púlpito Pastores buscan infundir aliento a los hombres y mujeres de fe, exhortando a “tomarse de Dios” y fortalecerse, pero también a actuar a favor de su ciudad.
“Tenemos que ser parte de provocar la paz en esta ciudad a través de nuestra vida y decirle a Dios que mire hacia Ciudad Juárez. Empezar a reclamar y compartir esa paz que tiene reservada para nosotros”, afirmó el Pastor Rafael Guzmán de la Iglesia Bautista “Jehová Nissi”, ubicada en una de las colonias con mayor incidencia delictiva.
Vigilias de oración, campañas de evangelismo, ayunos y rogativas, se han intensificado en los templos y aún fuera de ellos y de esta forma, los creyentes hacen “guerra espiritual” a favor de su ciudad, afirman los líderes de la iglesia.
“A veces el hombre está ensimismado, pero es necesario hacer conciencia y ver que en medio de esta violencia hay muchas víctimas, mujeres, jóvenes, niños, mucha gente que está sufriendo”, dijo por su parte el pastor Baltazar González, líder de la Alianza Ministerial Evangélica de Juárez.
En Ciudad Juárez existen alrededor de 1000 templos que profesan la fe cristiana evangélica, en los que la temática de las prédicas parten de la situación actual, incitando a los miembros a aferrarse a la fe e infundiéndoles esperanza.
El pastor evangélico Rafael Guzmán afirma que: “Solamente en Jesús puede haber paz, las autoridades no son la respuesta, no podemos poner toda nuestra esperanza y confianza en el gobierno, también la ciudadanía debe participar y Dios es la respuesta y él nos demanda que hablemos claro a los presidentes y a cada dirigente de la ciudad aún cuando se lleguen a molestar”.